CrIsToFeNo
Cristofeno (El hombre gordo que planchaba). Todo empezó cualquiera de un día cualquiera, cuando estaba a las una menos cuarto en la ventana de mi habitación, fumándome un porro para relajarme un poco, antes de agarrotarme completamente para introducirme en un profundo sueño. Me lo hice con tabaco de liar para que fuera más natural, y así subiera mas. Un poco de maría y un buen prensado dio lugar a un magnifica forma de relajarse en diez minutos solitarios. Cuando lo encendí, abrí la ventana para y la cortina, para que no se quedara el olor en la habitación. Como todas las noches, apague la luz de la mesita de noche y observe el expectante horizonte de fincas que me rodeaba. Un fulgor azul, de una habitación, me confesaba que había alguien a la una menos diez observando la pantalla de su ordenador mientras una tía por Web-cam, hacia sus fantasías realidad. A mi derecha, debajo de una discreta luz de terraza, había una pareja de unos 60 años que se deleitaban mostrando sus cuerpos desnud