Otra vez...



Estoy en el infierno.
En mi infierno personal, esperándote. Esperando que vengas a rodearme con tus brazos fuertemente. A que vengas y me salves de los demonios del pasado.
Porque aunque el infierno es grande siempre los acabo renombrando.
Encontrando lo que un día me hizo tanto daño y no he conseguido olvidar, después de tantos años.
Vuelve el dolor ; vuelve la rabia y la pena, y solo tu eres la luz tenue, distante y pequeñita que ilumina el interminable angosto y oscuro infierno en el que me oculto. En el que quiero morir y no puedo.
Desde aquel día en el que perdí la razón y el corazón, comencé a temer la vida y a amar la muerte.
No tengo ansia ya por nada, cada vez que aparecen sus caras endemoniadas ya nada vale nada, ya no importa nada.
No tengo ganas de vivir la espera, que desespera mi alma y mi turbia mente que con calma ansia notar tus brazos que me recogen del turbio mar, lleno de olas gigantes que contra escarpados acantilados chocan, y en el que me encuentro sin poder escapar.
Esperándolos de forma latente para que me arrastren a la superficie y me ayuden a sacar el agua de los pulmones. y poder toser y escupir todo el mal y la rabia que llevo dentro, y que no consigue controlar mi destrozado corazón, por mas que lo intento.
Y unirme en un abrazo contigo, tan fuerte que me rompa por dentro, todos los huesos y el resto de imprescindibles elementos, desangrándome para así liberarme de una vez.
Se mi luz y ayúdame a morir...

Comentarios

Dídac López ha dicho que…
No esperes más, aquí estoy
Ricardo Miñana ha dicho que…
Escribes muy bien paisana,
te deseo unas felices fiestas
y que el nuevo año te llenen de felicidad.
¡Feliz 2013!
un abrazo.

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