El amor y la nocilla




Llegados a este punto cabe hacer una gran reflexión sobre el amor, cariño, y de mas demostraciones de afecto que tenemos hacia otras personas.

Ahora cuando son las 7:30 de la mañana, y es imposible dormir muy a mi pesar, descubres ( que a pesar de que tienes un hambre voraz y te planteas ir corriendo a la nevera para coger algo dulce) el amor es un gran vaso de nocilla. Si, de esos que luego se lavan y se pueden usar como vaso normal para cualquier tipo de sustancia.

Y te lo planteas así porque ciertamente es lo primero que quieres comer, amor....

La ilusión de abrir ese bote nuevo, con esa sustancia de aspecto marrón sospechoso, pero que sabes que esta delicioso.

Quitas el film de aluminio, metes el cuchillo y esparces una buena cantidad de masa sobre el pan para luego comértelo, disfrutando de todo su sabor... y de como ese mejungue se va expandiendo por toda tu boca...mmmm como en el amor.


Vas gastando el bote, y la sustancia contenida... para desayunar...,merendar, almorzar.... y nunca te cansas de disfrutar de esa buena cantidad de masa chocolateada sobre el pan. Pero amigos, todo tiene su parte mala. ¿Que pasa cuando sacas grandes cantidades de amor, digo de nocilla, y el bote no se rellena?.... se acaba.

Si, señores, aquella masa de aspecto raro, que quedaba con aspectos imposibles y que muchas veces te preguntabas si no seria algo malísimo para ti o una clase de mierda (como en el amor), y que aun asi lo comías porque sabias que cada vez iba a estar mas delicioso, y lo ibas a disfrutar mas.

Pero un día te das cuenta de que mengua. Que aquel vaso con tu amor ( digo nocilla) preferida se esta acabando y decides racionarte. Porque claro, al hacerlo así a lo loco, desde un principio conlleva que se acabe mucho antes... y no es lo que quieres, pero se acaba.

A pesar de todo, se ha de reconocer que cuando abres el vaso de nocilla y ya no queda casi nada, y lo único que puedes hacer es repelar con el cuchillo de la mantequilla los resquicios, aunque sabes que nunca va a ser tan satisfactorio como al principio..., te toca pasar a las manos y te da igual... Te da igual lo que has hecho antes, simplemente metes el dedo en el bote de nocilla y te dedicas a arrastrarlo por los lados del vaso para coger tooooooda la cantidad que puedas, con un solo dedo. Te lo metes en la boca y vuelves a disfrutar como la primera vez de aquel sabor tan dulce que se expande y te produce placer, pero esta vez sin pan, sin esconderse, amor en esencia pura. Solos la sustancia y tu.

Pero nunca se tiene demasiado. Y vuelves a pasar el dedo por todo el vaso de nuevo... por los lados, por el fondo, pasando la lengua por el borde por si queda algo... pero se acaba, a pesar de saber que has cogido demasiado al principio, racionarte a la mitad y repelarlo al final la sustancia se acaba, y solo te quedan dos opciones. Lavar el vaso o hacer mas nocilla y rellenar ese bote que tanto amas.

Así que queridos, como reflexión matutina gastad toda vuestra nocilla ( amor ) en grandes cantidades, racionarlo si queréis y agotadlo hasta que no quede nada en el pobre vaso... pero no os olvidéis de rellenarlo, que se acaba...


Att: una mujer loca reflexionando



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